Purga

Se me ha hecho extraño leer este libro, no sé si recomendarlo y ni siquiera sé si me gusta, pero de lo que estoy segura es de que su lectura ha afianzado ciertas conexiones en mis neuronas que siempre han estaban ahí. Literariamente, a pesar de los muchos premios que ha recibido, no es como para echar cohetes ya que los trucos del oficio están demasiado a la vista, pero el valor de esta novela trasciende de las propias palabras, es como si algo flotara a su alrededor.

Aclaro que no es el feminismo lo que interesa en esta novela, sino la violencia de género, que ahora es más visible pero que existe desde siempre. Ciertas circunstancias la hacen más visible pero los sufrimientos han sido los mismos; han cambiado las épocas pero la violencia contra las mujeres permaneció, en todas las guerras, y también en tiempos de paz... y aun la sufrimos.

Para leer esta novela, convendria saber antes, sobre Estonia. La historia de este pais maltratado por alemanes y rusos, contiene la clave de todo lo que sucede en el libro. Pasado y presente, la trata de blancas, las purgas politicas, el horror, el miedo, el dolor, la inocencia y la brutal culpabilidad, lo humano y lo desafortunadamente humano. Una especie de contemplacion del abismo de la que cada cual deberia sacar sus propias conclusiones.

La joven y original escritora finlandesa Sofi Oksanen, maneja con sutileza una prosa muy plastica, que te hace ver, tocar y hasta oler el bosque, los objetos y las comidas. 

La escritora prescinde de cualquier tipo de descripcion sobre el horror del momento y prefiere centrarse en la imaginacion de la victima, que pensaba convertirse en un raton en el rincon de aquel cuarto, en una mosca en la lampara, hasta escapar de su cuerpo volando, Aliide ya no estaba alli.

Y no importa la nacionalidad, la violencia, y la violencia de género más todavía, existe desde siempre, en todas partes.

Las mujeres nos matriculamos más que los hombres, somos más flexibles que los hombres, compramos más libros que los hombres, somos más solidarias que los hombres y somos más frágiles (pero más audaces) que los hombres.

Yo supongo que las instituciones que se involucran en un conflicto bélico, como hicieron los países europeos, los Estados Unidos y la OTAN en los Balcanes, están para promover la paz. Pero en este caso y en todos los que conozco, ha sido todo lo contrario.

Aliide y Zara son un poco la representación de esa resistencia subterránea. La gente estaba pidiendo ayuda, no intervenciones militares. El papel de los Estados Unidos al respecto sigue siendo, como siempre, muy contradictorio y engañoso.

 Sigo con mucho interés la situación en los países árabes. Somos víctimas del totalitarismo, pero permitimos que la tiranía subsista. Este libro, como dije arriba, afianza la chispa que me impulsa a luchar contra la tiranía, aun a riesgo de todo; debemos luchar contra algo que no podemos soportar.

Quizás el Premio a la Mejor Novela Europea del Año 2010 le quede un poquito grande a Purga. Quizás no. Los premios no son más que valoraciones subjetivas de algunos que los otorgan, como la mia al escribir lo que estoy escribiendo.

Seguramente Purga no es libro que vas a leer una y otra vez siempre con el aliciente de un nuevo hallazgo o que irás recomendando por ahí a ojos cerrados.

Pero sin temor a equivocarme, puedo decir que Purga es un libro que conmueve, que nos hace tambalear hasta los huesos, que permite entender un poco más uno de los capítulos más duros de la historia europea y hasta donde pueden llegar los límites del sufrimiento humano que va carcomiendo nuestro espíritu hasta transformarnos en seres absolutamente desconocidos, incluso para nosotros mismos.