domingo, octubre 27, 2013

Me odia o son imaginaciones mías?

Mi IPhone me odia!. No hay otra explicación! 
Por eso hace que mis mensajes acaben siempre con algo parecido a: “Muchos bestias” o “Te mando un bestia muy grande” (en lugar de besito). O peor aún, me termina los correos más serios con “Un salido” en lugar de “Un saludo”. Hace poco hablando que quería ir a la feria de Exportación, decidió que corregía “ir a la Feria de Explotar”. Y total, mas bien he enflacado unos quilillos con tanto corre corre… Pero lo peor, peor, peor que me ha hecho el teléfono, fue cuando, tratando con un señor que no conozco de nada, por un tema profesional, al quererle responder “Ok, por mí sí” con las prisas no me di cuenta de que el teléfono corrigió “Ok, porno sí”. Y no lo descubrí hasta pasadas unas horas… Me pregunto quién diablos programa estos aparatitos. Y peor aun! Con la palabra porno!
Ah! Y como un día me olvide de apagarlo al entrar a una reunión de trabajo… Entonces fijo que me llama alguien. Y suena ese tono caribeño que esta de moda, pero claro, no para que suene en mitad de una reunion… Y yo voy y busco el móvil desesperada en el bolso. Y el puñetero se esconde en alguna parte, porque no hay quién lo encuentre. Y empiezo a vaciar el bolso de todas esas cosas imprescindibles que siempre llevo encima: un labial, por un "sin acaso", toallitas, compresas (esto solo cuando no las necesito, si las necesito no están), gafas de sol, cartera, llaves de coche, llaves de casa, llaves de oficina, un caramelo (me lo como), tortitas de arroz con chocolate por si tengo el día light, tableta de chocolate por si tengo el día no tan light, calculadora científica, un ejemplar del Plan General de Contabilidad, papeles arrugados con recetas e ideas de recetas escritas, y el perfume preferido. Y ya por fin, cuando he vaciado todo el bolso ante los ojos atónitos de todos los presentes... incluyendo a mi jefe, claro!!!.... aparece el dichoso IPhone, que por supuesto, justo en ese momento, deja de sonar… qué, me odia o son imaginaciones mías?

Bom Bom :P Los Cadillac's

martes, octubre 22, 2013

El conocimiento

“Un ser sin estudios, 
es instrumento ciego de su propia destrucción”
Simón Bolívar 
 El arma más poderosa, para la revolución posible, es el CONOCIMIENTO!!!
 Si no queremos oprimidos, comenzemos por educarnos, por aprender, 
por tener el arma más poderosa del mundo.
Durante los últimos catorce años, el Comandante Hugo Rafael Chávez Frías, dio muestras de avanzar en cuanto al conocimiento de nuestro aguerrido pueblo, sobre la necesidad de educarnos, basándose en el mandato expreso de nuestro Libertador Simón Bolívar, el cual expongo arriba: “Un ser sin estudios, es instrumento ciego de su propia destrucción”, partiendo de esta premisa histórica, hoy más que nunca se hace vivo el pensamiento de Bolívar y de Chávez.
Para los que tienen dudas, dejo aca un video de Anthony Gabby Carter, pongan especial atencion a su letra, la cual esta traducida, eduquemonos, es una obligacion para poder defendernos de los ataques de los imperios.
Somos el 99%, somos mayoria, por eso debemos decir basta ya!  

lunes, octubre 21, 2013

Pocas palabras

"Necesitamos pocas palabras para expresar lo esencial; 
necesitamos todas las palabras para hacerlo real"
Paul Éluard

Leí en un titular del portal BBC news que en Vietnam resulta imposible decir 'Te amo'. Y no es que los vietnamitas no se quieran entre sí, que supongo que lo harán más o menos como todos, sino porque no pueden emplear la frase 'Te amo' tal cual, pues en su idioma no existen las palabras ‘yo’ y ‘tú’.

En Vietnam la forma de comunicarse va de acuerdo a la edad de la gente. Así: “anh” serviría para denominar al hermano mayor, y “chi” para la hermana mayor, mientras “em” señalaría a un hermano más joven.

Y, entonces,
¿cómo se declaran su amor? Según el relato de BBC, es común escuchar frases como: “Hermano mayor ama a hermana menor”. Si la mujer es más vieja sería: “Hermana mayor ama a hermano menor”. Y así sucesivamente. Esta es la razón por la que los vietnamitas preguntan rápidamente a los extraños su edad, ya que para ellos resulta fundamental poder utilizar el pronombre adecuado y tratarlos con la cantidad exacta de respeto. Aunque la coquetería femenina no tiene fronteras, ya que las mujeres a menudo prefieren ser llamadas "em" (hermano más joven), independientemente de su edad.

http://www.bbc.co.uk/news/world-asia-23501757

 

domingo, octubre 13, 2013

Una historia que da para pensar...

En la fila del supermercado, el cajero le dice a una señora mayor que debería traer su propia bolsa, ya que las bolsas de plástico no son buenas para el medio ambiente.
La señora pide disculpas y explica: “Es que no había esta moda verde en mis tiempos.”
El empleado le contestó: “Ese es ahora nuestro problema. Su generación no puso suficiente cuidado en conservar el medio ambiente.”
Tiene razón: nuestra generación no tenía esa moda verde en esos tiempos:
En aquel entonces, las botellas de leche, las botellas de gaseosa y las de cerveza se devolvían a la tienda.
La tienda las enviaba de nuevo a la fábrica para ser lavadas y esterilizadas antes de llenarlas de nuevo, de manera que se podían usar las mismas botellas una y otra vez. Así, realmente las reciclaban.
Pero lleva razón, no teníamos esta moda verde en nuestros tiempos.
Subíamos las escaleras, porque no había escaleras mecánicas en cada comercio ni oficina. Íbamos andando a las tiendas en lugar de ir en coches de 300 caballos de potencia cada vez que necesitábamos recorrer 200 metros.
Pero tiene Vd. toda la razón. No teníamos la moda verde en nuestros días.
Por entonces, lavábamos los pañales de los bebés porque no los había desechables. Secábamos la ropa en tendederos, no en secadoras que funcionan con 220 voltios. La energía solar y la eólica secaban verdaderamente nuestra ropa. Los chicos usaban la ropa de sus hermanos mayores, no siempre modelitos nuevos.
Pero está en lo cierto: no teníamos una moda verde en nuestros días.
Entonces teníamos una televisión, o radio, en casa, no un televisor en cada habitación. Y la TV tenía una pantallita del tamaño de un pañuelo, no una pantallota del tamaño de un estadio de futbol. En la cocina, molíamos y batíamos a mano, porque no había máquinas eléctricas que lo hiciesen por nosotros. Cuando empaquetábamos algo frágil para enviarlo por correo, usábamos periódicos arrugados para protegerlo, no cartones preformados o bolitas de plástico. En esos tiempos no arrancábamos un motor y quemábamos gasolina sólo para cortar el césped; usábamos una podadora que funcionaba a músculo. Hacíamos ejercicio trabajando, así que no necesitábamos ir a un gimnasio para correr sobre cintas mecánicas que funcionan con electricidad.
Pero claro que está Vd. en lo cierto: no había en esos tiempos una moda verde.
Bebíamos del grifo cuando teníamos sed, en lugar de usar vasitos o botellas de plástico cada vez que teníamos que tomar agua. Recargábamos las estilográficas con tinta, en lugar de comprar una nueva y cambiábamos las cuchillas de afeitar en vez de tirar a la basura toda la maquina afeitadora sólo porque la hoja perdió su filo.
Pero,eso sí, no teníamos una moda verde por entonces.
En aquellos tiempos, la gente tomaba el tranvía o el autobús y los chicos iban en sus bicicletas a la escuela o andando, en lugar de usar a su mamá como taxista las 24 horas. Teníamos un enchufe en cada habitación, no un regleta de enchufes para alimentar una docena de artefactos. Y no necesitábamos un aparato electrónico para recibir señales desde satélites situados a miles de kilómetros de distancia en el espacio para encontrar la pizzería más próxima.
Así que me parece lógico que la actual generación se queje continuamente de lo irresponsables que éramos los ahora viejos por no tener esta maravillosa moda verde en nuestros tiempos.

Sinceramente una historia que da para pensar...
Normalmente se le echa la culpa a nuestras anteriores generaciones del daño ambiental que hay ahora, pero después de leer esto, 
aún lo crees? 
No seremos nosotros los que con tanto avance
estaremos cargándonos el medio ambiente en vez de sanearlo????....