"Lo que cuenta no es necesariamente el tamaño del perro en la lucha, es el tamaño de la pelea en el perro"
Dwight Eisenhower
Quiero pensar que buena parte de los que nos reunimos en torno a este blog (nunca me ha importado cuántos, sino quiénes), tenemos una sensibilidad parecida y quizá algunos otros puntos en común.
Me gustaría pensar que somos gente que, aunque entendemos perfectamente que la vida presenta serias y a veces graves dificultades, no nos arredramos por ello y somos capaces de luchar para sacar los asuntos adelante.
Me gustaría pensar también que somos de ese tipo de personas que, aunque veamos que la vida a veces se torna injusta y llegamos a plantearnos de vez en cuando tirar la toalla, al comprobar que a otros las cosas les resultan más sencillas, no nos desanimamos por ello y seguimos insistiendo en nuestro camino, aunque este parezca inevitablemente más largo y tortuoso.
Y me gustaría pensar que somos también gente honesta. De la que sabe que no es tan importante alcanzar lo que se pretende, sino que cuenta, y mucho, la forma en que lo hagamos.
Es decir, prescindiendo de las trampas, del perjuicio ajeno y de la
traición a nuestros principios morales o de cualquier otro tipo. Siempre es tiempo de cambiar para mejor, lo digo por experiencia propia.
La frase de hoy, prescindiendo del tono bélico, me gusta especialmente porque retrata una verdad inapelable. Quizá algunos duden y se retraigan
a la hora de emprender la lucha en pos de sus sueños (sean estos los
que sean), por considerar que no poseen las ‘armas’ de las que otros si
que disponen. Siempre, si establecemos la maldita comparación, encontraremos gente mejor,
más alta, más guapa, más inteligente, más talentosa, más, más, más…
tantos como queramos. Si así lo admitimos, no deberíamos emprender jamás
nada ya que, es indudable, siempre habrá otros que lo llevarán a cabo
de forma más óptima.
Afortunadamente, la vida es más sabia que todo eso
y si a otros les otorga una serie de cualidades, éstas se pueden suplir
con otras que no sólo equilibran la partida, sino que la pueden
inclinar a favor de cualquiera. Hablo del coraje, de la perseverancia,
de la determinación, del ahínco, de la ilusión, de las ganas, de la
pasión… Quien tenga todas, o algunas de ellas, no deberá preocuparse del
tamaño de las dificultades a las que se enfrente o de los rivales a los
que deba oponerse. Su fuerza es invulnerable.
No nacimos para ser felices, sólo para intentarlo. Sin embargo,
todos tenemos el derecho (y el deber) de luchar por nuestra felicidad.
Pienso como tú en que nacemos para intentar ser felices y compartir esa felicidad con los demás.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz semana.
Gracias amigo!!!
EliminarIgual te deseo a ti, una feliz semana!!!
Besos
Nadie me supera en ser yo mismo.
ResponderEliminarUn gran saludo.
En eso estamos muy de acuerdo amigo...
EliminarNadie nos supera en ser nosotros mismos....
Yo creo que la felicidad completa nunca se llega a lograr, y quizás esto lo haga más bella. La felicidad como el amor hay que pelearla todos los días.
ResponderEliminarBesos India Rebelde.
sudaca sociata
EliminarRafa, mi filosofo amigo, bellas palabras me dejas...
EliminarBesos y cuidate mucho!!!
Anonimo
EliminarOrgullosa estoy de ser SUR-AMERICANA!!! Que lo sepas, pues visto lo visto y vivido lo vivido en el tuyo, no hay comparacion con este paraiso llamado Venezuela!!!
Orgullosamente Venezolana, orgullosa de ser Latinoamericana y orgullosa de ser India.
Cordial saludo
Bonito vídeo!!!
ResponderEliminarUn gran elogio a la lucha sin cuartel!!!
No importa el tamaño sino las ganas de dar la pelea ja ja ja!!!
Muy bien India Rebelde!!!
Mi gran abrazo!!!
Anda mi querido Aristos, mi filosofo...
EliminarA dar la pelea puessssss......
Te abrazo fuerteeeeee
Qué buenas reflexiones encontramos siempre aquí, India.
ResponderEliminarTenemos el derecho y el deber de ser felices. Y en eso debemos estar.
Un abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.
Gracias mi querido Mos...
EliminarRecibo tu abrazo.
PD: Debido al reto de la orilla estoy más ocupado y no puedo visitar los blogs con la misma celeridad de siempre.
ResponderEliminarMis excusas.
Mos.
No te preocupes amigo, que yo ando tambien bastante liada...pense que despues del triunfo del 7 Octubre, tendria mas descanso, pero que vaaaa.....jajajaja....
EliminarPero eso si, felizzzzzz estoyyyyyyy!!!!
Besos caribeños.
India:
ResponderEliminarPara comenzar te digo que me quedé sorprendido felizmente de ese "orgasmo" poético que tuviste luego de leer mi último poema...me estremeció!
El vídeo que nos muestras aquí es estupendo así como la entrada en general. Siempre he pensado que el tamaño no importa sino la calidad, no importa, tampoco, la cantidad sino, otra vez, la calidad y, entonces, cuando en espacios como el tuyo, coincidimos seres humanos abiertos al mundo, con la verdad desnuda como un pan fresco para todos, capaces de ser solidarios, seres que intercambiamos conocimientos, que somos amantes de la paz y estamos llenos de amor, entonces, repito, tenemos razones para creer que un mundo nuevo es posible.
Te dejo un beso mi querida Camarada.
Jeje... que decirte mi buen amigo, teniendo los maestros que tengo aca....
EliminarLo importante en esta vida es disfrutar de cada momento para poder sentirnos felices.
ResponderEliminarUn beso.
Gracias por tu visita y comentario Maria...
EliminarBesos
Perdona mi ausencia,; ha sido debida a un problema con mi PC.
ResponderEliminarEstupenda la reflexión que nos dejas hoy.
Mentalizarnos de ese derecho y DEBER de ser felices no es cosa vana ni fácil.
Nadie es más ni menos que los demás, símplemente es diferente.
Un beso.
Bonita reflexion querida Belen...
EliminarPalabras muy ciertas.
Fuerte abrazo.